Ocurrió el sábado en la noche, en Lubbock, Texas. Cuatro adolescentes emprenden la fuga en una camioneta luego de un robo. Minutos después son ubicados por la policía y se inicia una persecución a alta velocidad.
En el vehículo va un quinto pasajero: Una bebé de 18 meses.
En medio de la persecución, la camioneta se voltea, rueda aparatosamente y la bebé sale impulsada fuera del vehículo. No sufrió daños graves.
Sí, es cierto, tiene suerte. Pero lo que realmente me impresiona es la determinación de la bebé. Se levanta y en lugar de llorar o amilanarse, se dirige, con una resolución envidiable, hacia el lugar en donde está el vehículo en el que venía, el que por cierto no se había parado del todo. Impresiona, como dije, su determinación, al mismo tiempo que conmueve su vulnerabilidad. Vean el video!
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